http://blogs.hazteoir.org/davsevilla/files/2009/04/mo_manifestacion_en_defensa_de_la_vida_contra_el_aborto_002.jpg
Quizá a cualquiera esta imagen le resulte normal. A mí, ante todo, me da verguenza.
Se presume de Estado democrático y de libertades políticas. Sin embargo, no tenemos ningún problema, ya no sólo en manipular a los niños en las escuelas, sino en llevarles a manifestaciones de temas suficientemente serios como para que no se lo planteen los niños.
Esto, señores, es adoctrinamiento. Ya quisiera Goebbles haber dispuesto de esta masa de niños nazis ante el edificio del Reichstag.
jueves, 29 de abril de 2010
jueves, 8 de abril de 2010
¡Menuda sorpresa!
¿Quién lo iba a decir, verdad?
A todo el mundo se le ve el plumero.
Primero vino Cristo y nos lo enseñó todo.
Luego los cruzados nos lo apuntaron con acero por si no nos habíamos enterado.
En el '36 los mismos cruzados repitieron la jugarreta causando miles de muertos.
Y en el siglo XXI la Vanguardia Revolucionaria calienta un asiento en la Universidad Complutense de Madrid: la pública, la de todos.
http://www.lasextanoticias.com/videos/ver/ultimo_informativo_emitido/247941
Minuto 13
A todo el mundo se le ve el plumero.
Primero vino Cristo y nos lo enseñó todo.
Luego los cruzados nos lo apuntaron con acero por si no nos habíamos enterado.
En el '36 los mismos cruzados repitieron la jugarreta causando miles de muertos.
Y en el siglo XXI la Vanguardia Revolucionaria calienta un asiento en la Universidad Complutense de Madrid: la pública, la de todos.
http://www.lasextanoticias.com/videos/ver/ultimo_informativo_emitido/247941
Minuto 13
Hace siete años
Hace siete años, era un delito llevar unos prismáticos... ¡Aunque ni siquiera los hubiera!
Juan (en este caso Johnny) llamó por radio a su superior porque debió de ver un destello en el Hotel Palestine de Bagdad. Su superior, si se hubiera llamado Marcial le habría dicho "Dispara, dispara, ¡con dos cojones!"; como no era Marcial, sino quizás Malcom, o George o Ronald seguramente le dijo "Kill'em all!" (irónicamente, como el disco de Metallica). Poco después moría José Couso. El día anterior, había fallecido otro periodista, éste hijo del político Julio Anguita, de igual nombre.
Tengo la impresión de que recordamos más el caso de José Couso porque le dispararon los norteamericanos. Aunque quizás (no sé, a lo mejor son imaginaciones mías) se tiene más fijación en el caso de Couso porque fue en un Hotel lleno de civiles (el caso de Anguita, d.e.p., fue en un campamento estadounidense), cosa que era bien sabida por Estados Unidos.
Lo cojonudo, es que unos días antes había aparecido el Hotel Palestina como posible objetivo.
Como dice Olga Rodríguez, hoy, y siempre todos somos ojeadores.
Juan (en este caso Johnny) llamó por radio a su superior porque debió de ver un destello en el Hotel Palestine de Bagdad. Su superior, si se hubiera llamado Marcial le habría dicho "Dispara, dispara, ¡con dos cojones!"; como no era Marcial, sino quizás Malcom, o George o Ronald seguramente le dijo "Kill'em all!" (irónicamente, como el disco de Metallica). Poco después moría José Couso. El día anterior, había fallecido otro periodista, éste hijo del político Julio Anguita, de igual nombre.
Tengo la impresión de que recordamos más el caso de José Couso porque le dispararon los norteamericanos. Aunque quizás (no sé, a lo mejor son imaginaciones mías) se tiene más fijación en el caso de Couso porque fue en un Hotel lleno de civiles (el caso de Anguita, d.e.p., fue en un campamento estadounidense), cosa que era bien sabida por Estados Unidos.
Lo cojonudo, es que unos días antes había aparecido el Hotel Palestina como posible objetivo.
Como dice Olga Rodríguez, hoy, y siempre todos somos ojeadores.
miércoles, 7 de abril de 2010
Tirada del día.
No es lo que soy (un fascista) sino lo que tenía (liderazgo sobre Euskadi Ta Askatasuna).
http://www.europapress.es/euskadi/noticia-pse-cree-absurdo-planteamiento-pnv-blindaje-empresas-20100407141734.html
***
El Faraón nunca mira al esclavo
¡Porque es un Dios!
¿Por qué es un Dios?
No, porque le da verguenza,
hacerse pasar por Dios.
¿No habréis visto a Dios, por casualidad, verdad?
http://www.europapress.es/euskadi/noticia-pse-cree-absurdo-planteamiento-pnv-blindaje-empresas-20100407141734.html
***
El Faraón nunca mira al esclavo
¡Porque es un Dios!
¿Por qué es un Dios?
No, porque le da verguenza,
hacerse pasar por Dios.
¿No habréis visto a Dios, por casualidad, verdad?
martes, 6 de abril de 2010
Juan Vistió de Pijama
No sabía porqué, Juan estaba entre rejas y Miguel no.
Miguel y Juan habían sido amigos de toda la vida. Juntos habían jugando a los Lego y a los PlayMobil, juntos habían visto las películas de Rambo y "Chuache". Juntos habían jugado al Street Fighter y al de atropellar señoras con un auto. Juntos habían fumado su primer canuto; y ahí se separaron sus caminos.
Cuando Miguel llegó a casa, su padre, que era policía, le golpeó unas cuantas veces; y aunque Miguel le odió durante toda su vida, jamás se imaginó que aquella paliza era la incapacidad del padre para expresar su prohibición a meterse en un mundo que él conocía demasiado bien (pero eso es otra historia). La principal consecuencia fue que Miguel no quiso volver a saber nada de los porros.
El padre de Juan era un obrero de la construcción que luego se iba a beber al bar; también podía haber sido un empresario que en su tiempo libre jugara al tenis, pero eso también es otra historia. Nadie le dijo a Juan donde se metía.
Y, sin embargo, tampoco era lo que le separaba de los otros que, aunque fumaban con él, no estaban ahora entre rejas.
Quizá fue que Juan se pasó un poco más de la raya, y para conseguir algo de esto atracó a alguien.
Quizá fue que Juan se armó de coraje y dió un tirón a una señora, con tal de que con la pasta pudiera echar un cable a su madre.
Quizá fue que Juan, ahogado en una sociedad burguesa donde la violencia se ve por la tele pero las relaciones sexuales no, no comprendió en qué punto el "no" de una chica quiere decir no.
O a lo mejor fue un poco de todo. A lo mejor entró por casualidad, y luego salió, y luego volvió a entrar, como si alguien jugara con él al Pinball mientras él sólo quería sobrevivir como alguien más. A lo mejor, ese jugador convirtió a Juan en un esclavo, en un fantasma, cuya única solución era desaparecer entre rejas y convertirse en un número más dentro de las instituciones penitenciarias.
Y si no andaba con cuidado, aunque fuera menor, se le pasaba el arroz en la sombra.
http://www.europapress.es/epsocial/infancia-00327/noticia-rubalcaba-no-descarta-revisar-ley-menor-20100406143516.html
Miguel y Juan habían sido amigos de toda la vida. Juntos habían jugando a los Lego y a los PlayMobil, juntos habían visto las películas de Rambo y "Chuache". Juntos habían jugado al Street Fighter y al de atropellar señoras con un auto. Juntos habían fumado su primer canuto; y ahí se separaron sus caminos.
Cuando Miguel llegó a casa, su padre, que era policía, le golpeó unas cuantas veces; y aunque Miguel le odió durante toda su vida, jamás se imaginó que aquella paliza era la incapacidad del padre para expresar su prohibición a meterse en un mundo que él conocía demasiado bien (pero eso es otra historia). La principal consecuencia fue que Miguel no quiso volver a saber nada de los porros.
El padre de Juan era un obrero de la construcción que luego se iba a beber al bar; también podía haber sido un empresario que en su tiempo libre jugara al tenis, pero eso también es otra historia. Nadie le dijo a Juan donde se metía.
Y, sin embargo, tampoco era lo que le separaba de los otros que, aunque fumaban con él, no estaban ahora entre rejas.
Quizá fue que Juan se pasó un poco más de la raya, y para conseguir algo de esto atracó a alguien.
Quizá fue que Juan se armó de coraje y dió un tirón a una señora, con tal de que con la pasta pudiera echar un cable a su madre.
Quizá fue que Juan, ahogado en una sociedad burguesa donde la violencia se ve por la tele pero las relaciones sexuales no, no comprendió en qué punto el "no" de una chica quiere decir no.
O a lo mejor fue un poco de todo. A lo mejor entró por casualidad, y luego salió, y luego volvió a entrar, como si alguien jugara con él al Pinball mientras él sólo quería sobrevivir como alguien más. A lo mejor, ese jugador convirtió a Juan en un esclavo, en un fantasma, cuya única solución era desaparecer entre rejas y convertirse en un número más dentro de las instituciones penitenciarias.
Y si no andaba con cuidado, aunque fuera menor, se le pasaba el arroz en la sombra.
http://www.europapress.es/epsocial/infancia-00327/noticia-rubalcaba-no-descarta-revisar-ley-menor-20100406143516.html
lunes, 5 de abril de 2010
Nunca te conoceré.
Nunca te conoceré.
Nunca te voy a conocer.
Pero sé que te quiero.
Por mis pecados, por los tuyos.
Porque tenías derecho a vivir y se te ha arrebatado.
Porque no tenías derecho a morir y te lo han obligado.
Ayer Domingo, cuando se suponía que resucitaba El de las Barbas, tú fallecías.
¿Y quién te escuchaba?
Si acaso sólo aquel que vio a un desagradable mendigo durmiendo en un cajero.
No tenían derecho a robarte la felicidad.
Tal vez fueras una persona repugnante.
Tal vez lo fueras por genética.
Tal vez por la educación.
Tal vez porque te dió la gana.
Pero sé que te quiero.
Porque nunca habrá nadie como tú.
Porque tenías derecho a vivir y se te ha arrebatado.
Porque no tenías derecho a morir y te lo han obligado.
Tal vez (muy probablemente) eras mejor persona que yo.
Tal vez fuiste padre de una familia.
Tal vez las circunstancias te llevaron por el camino de la mala vida.
Tal vez (quién sabe), no hay más mal ni más bien que aquel que impone El que puede Dormir Tranquilo todas las noches.
No te voy a engañar, no querría estar en tu lugar.
Pero tampoco quiero que tú estés en ese lugar.
Y nos toca mover ficha; mover ficha para que la gente no vaya a ese lugar.
Porque te quiero.
Y mientras te quiero.
[ http://www.europapress.es/cantabria/noticia-aparece-muerto-mendigo-interior-cajero-centro-santander-20100404180629.html ]
Nunca te voy a conocer.
Pero sé que te quiero.
Por mis pecados, por los tuyos.
Porque tenías derecho a vivir y se te ha arrebatado.
Porque no tenías derecho a morir y te lo han obligado.
Ayer Domingo, cuando se suponía que resucitaba El de las Barbas, tú fallecías.
¿Y quién te escuchaba?
Si acaso sólo aquel que vio a un desagradable mendigo durmiendo en un cajero.
No tenían derecho a robarte la felicidad.
Tal vez fueras una persona repugnante.
Tal vez lo fueras por genética.
Tal vez por la educación.
Tal vez porque te dió la gana.
Pero sé que te quiero.
Porque nunca habrá nadie como tú.
Porque tenías derecho a vivir y se te ha arrebatado.
Porque no tenías derecho a morir y te lo han obligado.
Tal vez (muy probablemente) eras mejor persona que yo.
Tal vez fuiste padre de una familia.
Tal vez las circunstancias te llevaron por el camino de la mala vida.
Tal vez (quién sabe), no hay más mal ni más bien que aquel que impone El que puede Dormir Tranquilo todas las noches.
No te voy a engañar, no querría estar en tu lugar.
Pero tampoco quiero que tú estés en ese lugar.
Y nos toca mover ficha; mover ficha para que la gente no vaya a ese lugar.
Porque te quiero.
Y mientras te quiero.
[ http://www.europapress.es/cantabria/noticia-aparece-muerto-mendigo-interior-cajero-centro-santander-20100404180629.html ]
domingo, 4 de abril de 2010
Juan Fue A Beber
Sin comerlo ni beberlo (qué paradoja), Juan estaba con una botella en la mano.
Y podía ser rebelde, pero no revolucionario.
Podría estar contra del Plan Bolonia, pero sin armas para enfrentarse a él.
Podría estar contra del sistema penitenciario, pero sin aliento para estar en pie.
Podría estar contra el capitalismo, salvaje y devorador, pero sin capacidad para estar de pie sin tambalearse.
Podría ser un esclavo. Para siempre.
Y podía ser rebelde, pero no revolucionario.
Podría estar contra del Plan Bolonia, pero sin armas para enfrentarse a él.
Podría estar contra del sistema penitenciario, pero sin aliento para estar en pie.
Podría estar contra el capitalismo, salvaje y devorador, pero sin capacidad para estar de pie sin tambalearse.
Podría ser un esclavo. Para siempre.
sábado, 3 de abril de 2010
Juan Cogió Su Fusil
Un día le dijeron a mi amigo Juan que el trabajar por un mísero salario y meter un papelito en una urna cada cuatro años era democracia. Con esa urna no cambiabas el salario, por cambiar, no cambiabas nada. Pero si te parecía mal, también estaba la dictadura, en la que era más fácil que a la policía se le fuese la mano.
Un día, le dijeron a mi amigo Juan que la democracia había sido una victoria de todos, y entre todos había que defenderla (aunque no vió a ningún señorito en el frente). Le pusieron un casco y un fusil, dispuesto a pegar tiros a gente que no conocía por motivos que, para que nos vamos a engañar, tampoco conocía muy bien. A lo mejor era porque en vez de hacer una carrera se fue a trabajar a un taller.
Un día, le dijeron a mi amigo Juan que la democracia había sido una victoria de todos, y entre todos había que defenderla (aunque no vió a ningún señorito en el frente). Le pusieron un casco y un fusil, dispuesto a pegar tiros a gente que no conocía por motivos que, para que nos vamos a engañar, tampoco conocía muy bien. A lo mejor era porque en vez de hacer una carrera se fue a trabajar a un taller.
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